domingo, 17 de noviembre de 2013

PALEONTOLOGIA

La Paleontología (del griego «παλαιος» palaios = antiguo, «οντο» onto = ser, «-λογία» -logía = tratado, estudio, ciencia) es la ciencia que estudia e interpreta el pasado de la vida sobre la Tierra a través de los fósiles.1 Se encuadra dentro de las Ciencias Naturales, posee un cuerpo de doctrina propio y comparte fundamentos y métodos con la Geología y la Biología, con las que se integra estrechamente.
Entre sus objetivos están, además de la reconstrucción de los seres que vivieron en el pasado, el estudio de su origen, de sus cambios en el tiempo (evolución y filogenia), de las relaciones entre ellos y con su entorno (paleoecología, evolución de la biosfera), de su distribución espacial y migraciones (paleobiogeografía), de las extinciones, de los procesos de fosilización (tafonomía) o de la correlación y datación de las rocas que los contienen.
La Paleontología permite entender la actual composición (biodiversidad) y distribución de los seres vivos sobre la Tierra (biogeografía) -antes de la intervención humana-, ha aportado pruebas indispensables para la solución de dos de las más grandes controversias científicas del pasado siglo, la evolución de los seres vivos y la deriva de los continentes, y, de cara a nuestro futuro, ofrece herramientas para el análisis de cómo los cambios climáticos pueden afectar al conjunto de la biosfera.



La finalidad primordial de la Paleontología es la reconstrucción de los organismos del pasado, no sólo de sus partes esqueléticas, sino también las partes orgánicas desaparecidas durante la fosilización, restituyendo el aspecto que tuvieron en vida, sus actitudes, etc. Para ello se vale de los mismos principios ya establecidos: actualismo, anatomía comparada, correlación orgánica y correlación funcional.
Postulado de producción: los fósiles son productos directos o indirectos de organismos que vivieron en el pasado (entidades paleobiológicas).2
Actualismo biológico: los seres del pasado se regían por las mismas leyes físicas y biológicas, y tenían las mismas necesidades que los actuales.3 Permite este principio, por ejemplo, afirmar que los peces del Silúrico tenían branquias, porque las tienen los peces actuales (aunque no sean los mismos); y que los dinosaurios ponían huevos, como los cocodrilos, lo cual se ha visto posteriormente corroborado al encontrarse fósiles de huevos, y nidos, conservados en algunos yacimientos.
Anatomía comparada: Permite colocar a los organismos extintos en el sitio que les corresponde del cuadro general de los seres vivos, obteniendo así el punto de referencia necesario para poder aplicar el principio de la correlación orgánica. Aunque los fósiles solo nos aporten una pequeña parte anatómica de un taxón extinto, la anatomía comparada nos permite inferir y completar determinadas características anatómicas o fisiológicas ausentes de los mismos.
Principio de correlación orgánica: Postulado por Cuvier.4 Cada ser orgánico forma un conjunto cuyas partes se complementan, determinando todas las demás y por tanto puede ser reconocido por un fragmento cualquiera, bastando en último término un trozo de hueso para identificarlo.
Correlación funcional: Conocida mejor como morfología funcional, es la parte de la Paleontología que trata de las relaciones entre la forma y la función, es decir: que intenta relacionar las estructuras observadas en los fósiles con la función que realizaban en el organismo cuando estaba vivo. Para ello utiliza diversos métodos o líneas de análisis.
http://es.wikipedia.org/wiki/Paleontolog%C3%ADa


EL NARCOTRAFICO EN COLOMBIA

El economista e investigador Ricardo Rocha presentó la publicación "Las Nuevas Dimensiones del Narcotráfico en Colombia", la cual fue cofinanciada por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y el Ministerio de Justicia y el Derecho.
Este libro es una actualización de la investigación realizada por el mismo autor en el año 2000 titulada "La Economía Colombiana tras 25 años de narcotráfico".
En la presentación del libro estuvieron presentes el Viceministro de Política Criminal y Justicia Restaurativa, Jorge Fernando Perdomo Torres;  el Director de la Unidad Administrativa especial para la Consolidación Territorial, Álvaro Balcázar; y el Representante de UNODC en Colombia, Aldo Lale-Demoz.



Esta investigación analiza las dinámicas espaciales, económicas y medioambientales de las actividades ilícitas relacionadas con la producción y comercialización de drogas en la economía colombiana.
Entre las principales conclusiones de la investigación se encuentran:
•             La inserción de Colombia en el narcotráfico ominosamente persistiría en el mediano plazo, pues a pesar de la caída en la producción exportable de cocaína, en el mercado internacional persiste la ventaja comparativa para la oferta y la demanda se ha reacomodado.
•             El área de coca detectada en 2009 equivalía al 0,1% del territorio nacional, pero su dispersión y movilidad afectarían una décima parte.
•             La coca habría contribuido con cerca de 800 mil hectáreas de bosque talado desde 1981 y con una quinta parte de la deforestación ocurrida en Colombia en el siglo XXI.
•             La coca es una fuente de ingresos que hace vulnerable a una población estimada en  180 mil familias, las cuales  en su mayoría  no alcanzan a consumir  el mínimo vital.
•             El efecto globo o balón obedece al nexo entre la vulnerabilidad a la coca y la colonización. Exacerbado por las condiciones ambientales, la vulnerabilidad de la población a sembrar coca y la dotación de infraestructura vial.  Mitigado por las diferentes políticas a pesar de su precaria articulación.
•             Hasta el momento, el narcotráfico ha mostrado un dilatado y pronunciado declive en términos macroeconómicos. Siguiendo la metodología de la contabilidad del valor agregado,  la contribución del narcotráfico al PIB habría declinado de 0,8 % en 1999  a 0,3% en 2009.
•             La suma del valor agregado y de la repatriación de utilidades daría promedios de 2,8% y 0,7% del PIB para la primera y segunda mitad de la primera década del siglo XXI.
•             Al menos la mitad de las utilidades habrían tenido cabida en el mercado paralelo de divisas y por consiguiente, esta limitada capacidad de absorción también explica el rezago de sus perturbadores efectos.
•             Las externalidades negativas del narcotráfico aumentaron durante su declive económico, porque las sucesivas mutaciones como carteles, grupos armados ilegales, bandas criminales y pandillas, trajeron mayor fragmentación y degradación de la pugna competitiva.
•             Durante la última década, dada la conexión pobreza-criminalidad-crecimiento la reducción del  narcotráfico  facilitó una  expansión de la economía equivalente al 3,5% en el PIB, permitiendo aprovechar  la internacionalización, el fortalecimiento institucional y el progreso en la educación.
•             La lucha contra los carteles exportadores demandó de fortalecimiento institucional y de capacidades para enfrentar el crimen organizado y  su naturaleza trasnacional.  El narcotráfico como trasfondo del conflicto armado llevó a insertar la política antidroga dentro de la estrategia de desarrollo, invocando la corresponsabilidad internacional.
•             Ahora, la estrategia está buscando sinergias de las integralidad entre diferentes políticas, así como la consolidación de resultados. De hecho, una simulación de lo anterior con datos para 2000-2007, si se hubiere dado una escalada simultánea en los diferentes componentes de política, en una mayor proporción se habría reducido el área de coca.

•             De esta manera, así como en el pasado el narcotráfico ha comprometido la potencialidad y la sostenibilidad del crecimiento y del bienestar en Colombia, aún constituye una sombra para su futuro.
http://www.unodc.org/colombia/es/investigacionarcotrafico.html

LA PROSTITUCION

1.- DEFINICIÓN


Procedente de la voz latina <<prostituere>> que significa originariamente “deshonrar” o “manchar”, también es conocida con el nombre de “meretricio”.

La prostitución consiste en tener relaciones sexuales con personas extrañas a cambio de dinero u otros objetos de valor. Está implícito que el pago se realiza para obtener una gratificación específica. La prostitución es un servicio que puede ser efectuado por hombres o mujeres a solicitud bien de hombres o de mujeres, tiene lugar en las ciudades de todo el mundo y presenta ciertas características comunes, aunque el número de prostitutas puede variar enormemente de una ciudad a otra que se encuentre próxima a ella.




2.- HISTORIA DE LA PROSTITUCIÓN

El concepto de prostitución a variado tanto según las épocas, como los pueblos y hasta desde el punto de vista jurídico, social y médico. Actualmente el concepto se ha extendido tanto en el campo de las investigaciones que según algunos autores como Wuttke afirman que existe la prostitución incluso en las especies animales.

En el género humano la prostitución se encuentra definida en las antiguas leyes atenienses. Solón su primer organizador le da como caracteres la variedad de individuos a los que se entrega la mujer.

En los tiempos de Roma el concepto se comprueba a través de las palabras de “quaestuosa” o que solicita, y “meretriz” o que comercia. La diferencia entre meretriz y la mujer de prostíbulo es que la primera ejerce su comercio clandestinamente y la segunda lo hace públicamente.

Las inscripciones Pompeyanas y algunos textos legales de su época excluyen del concepto de prostitución a la mujer adúltera o a la mujer que tiene un amante per incluyen a la mujer que mantiene relaciones clandestinamente.

Las leyes de Digesto no hablan para nada de la prostitución masculina hetero y homosexual, tan común sin embargo en la antigüedad, en cambio separa en la prostitución femenina los conceptos de prostituta vulgar ó “mullier quaestuaria” de los de concubina o que vive únicamente con un soltero.

Las ideas cristianas fijaron ante todo el punto de vista de la promiscuidad sexual para caracterizar la prostitución según se ve en una carta de San Jerónimo en la que se define a la prostitución como la que se entrega al vicio de muchos.

El derecho germánico no separó, como el romano, las diversas variedades de comercio carnal fuera del matrimonio, sino que las confundió todas en el mismo concepto limitándolas, sin embargo, a las mujeres libres y no a las esclavas. De estas fuentes legales nacieron las diversas definiciones desde el siglo XVII y que se han recopilado en un sin fin de publicaciones.

Existen indicios de que ya en los tiempos prehistóricos existía la prostitución, según las afirmaciones de algunos investigadores que llegaron a esta conclusión tras la observación de pintura rupestres.

En la Edad Antigua, Solón, político Ateniense creó unas leyes de organización para el estado, el objeto de las leyes solonianas era proteger el matrimonio y evitar el adulterio que castigaba con pena de muerte, las mujeres libres no eran admitidas en la clase de las prostitutas que se reclutaban exclusivamente entre las esclavas extranjeras, éstas debían pagar su contribución al estado en gran parte para la erección del templo de “Afrodita Pandemus”. Sin embargo aparte de la prostitución oficial existía una pribada libre de las HETAIRAS Y CONCUBINAS, cuya frecuentación no tenía nada de vergonzoso ni aún para los casados.

En los tiempos de Roma no se halla reconocida la prostitución hasta el siglo III a. De C, la extensión de la prostitución a Roma se debió al rigor de las leyes contra el adulterio y la seducción, que persistían aún durante el reinado de Augusto. Las guerras y conquistas de los romanos al aumentar enormemente el tráfico de esclavos favorecieron como consecuencia la prostitución.

Ésta se ejercía desde la infancia educando a propósito a las destinadas a ella y por cuenta de mercaderes o lenones de ambos sexos, se observaban una serie de condiciones como en un contrato cualquier, pudiendo liberarse las prostitutas por un precio fijo que pagaban sus amantes, se cree que en aquellos tiempos hubo de alcanzar la cifra de aquellas mujeres una proporción mucho mayor que en la actualidad.

No solamente en Roma sino en Corinto, Alejandría, Neápolis, Bizancio, Antioquía y Cartago, se contaban innumerables prostitutas, ya en barrios especiales ejerciendo libremente su oficio, generalmente como danzarinas y flautistas. No faltaban fiestas, a veces, con carácter religioso y a las que concurrían aquellas como las célebres Afrodisias y Dionisiacas, Floralias y Bacanales. Las cenas con mujeres de tal condición conservaban el nombre griego de SYMPOSION, eran frecuentes y muy a la moda reconociéndolo autores como por ejemplo Cicerón.

También existían algunas costumbres que se asemejaban a las modernas como la de los “Restaurantes galantes” o “Escuelas de Flautistas”

Los baños y termas eran asimismo punto de reunión de mujeres galantes y de los petrimetres de la época, conocidos por ARDELIONES. En los molinos, las tahonas, tiendas de vinos y aun en las calles y plazas eran comunes las escenas de prostitución por parte de las ALETRIS, ALICARIAE, AMBULATRICES Y NOCTILUCAE.



Había templos especiales, como el Isis de Romaque no eran mas que lugar de citas como también lo eran los Pórticos, Anfiteatros, las Arenas y aun los Cementerios conocidos son los lupanares de Pompeya y Herculano o casa de un solo piso, con cinco habitaciones reducidas, alrededor del vestíbulo pinturas e inscripciones obscenas y en la parte alta una sala y diversos aposentos con salida separada por otra escalera todo lo cual daba al lugar una atmósfera pesada, fétida y oscura. Estos lugares no eran constantemente habitados, sino simplemente alquilados de momento existiendo, no obstante, casas de habitaciones permanentemente con sus rótulos en las celdas expresando el nombre de guerra de las mujeres.

Se les consentía una serie de adornos sea de joyas o de riqueza de vestidos, predominando los colores púrpura y azafrán, los vestidos transparentes, las cadenas de oro, los pendientes, cinturones todo ello realizado con piedras preciosas. No era raro por otra parte el abuso de bebidas alcohólicas ni tampoco infrecuente el uso de abortivos de toda clase.

Los precios podían llegar a ser exorbitantes y tampoco eran raros los grandes regalos como dos colmillos de elefante de l0 pies de largo entregados por el emperador romano Carino a una mujer para que construyera con ellos una cama.

En la Edad Media no se rompió con las tradiciones de la antigüedad en lo referente a la prostitución, adoptando, por el contrario, muchos de sus puntos de vista. Se aprecia más bien una transformación gradual que una verdadera reforma en tan importante problema social por parte de los Gobiernos, filósofos y moralistas de la época. Donde más claramente se observa esta continuidad es en el Imperio bizantino, como puede colegirse de los escritos de Procopio y de Miguel Psellos.

La capital de los emperadores de los antiguos ofrecía en el barrio de Gálata el aspecto de los antiguos centros de prostitución de Grecia y Roma: lo propio puede decirse de Chipre y de Creta, que se hicieron célebres en este sentido, mencionándolos los viajeros extranjeros como Ibn batuta. La influencia de la prostitución bizantina se hizo sentir, asimismo, con todos sus refinamientos en el mundo musulmán. Las conquistas de los árabes en Siria y Egipto, tuvieron como consecuencia la adopción de costumbres del vencido, y así, la capital islamita de damasco parecíase en un todo a una ciudad griega. En general, la prostitución en las ciudades medievales y especialmente las del Norte, adoptó la forma cerrada de los burdeles, aunque no faltaban casos de la ambulante en forma de danzarinas o tafiedoras de harpa y cítara.

Entre los árabes se encontraban tales artistas con el nombre de mumisa , voz derivada del griego mimás, siendo muy celebradas en las poesías árabes como el diván de Mutalami. Los judíos habían mantenido las prohibiciones seculares de los libros sagrados con respecto a la prostitución, aunque la influencia griega se había traducido en una tolerancia muy extensa en la práctica. Flavio Josefo menciona ya la existencia de numerosas prostitutas, por más que no parece hubiera una verdadera organización de las mismas entre el elemento exclusivamente judío. Si el Talmud menciona casos que recuerdan las costumbrs grecorromanas, es sólo por efecto de la influencia de las mismas, existiendo sectas intransigentes como las de los Esenios que vedaban toda relación sexual ilícita. La sociedad cristiana no adoptó el punto de vista ascético y por tanto prohibitivo, sino que estableció la tolerancia desde los primeros tiempos, no faltando, con todo, sus protestas y reacciones momentáneamente victoriosas.



En general las prostitutas de la edad Media ejercían su comercio como gremio reconocido, figurando en las entradas solemnes de príncipes en las poblaciones festejándoles con ofrendas de flores. No era infrecuente tampoco que las visitasen entonces grandes dignatarios, que, por otra parte, las obsequiaban con regalos para bailes y festejos. Tal ocurrió en Viena durante el reinado del emperador Segismundo en 1435 y en Praga en el del emperador Alberto II.

Las ordenaciones acerca del comercio de las prostitutas eran tan comunes como minuciosas, negándoseles, sin embargo, el derecho de ciudadanía a partir del siglo XV. Se las obligaban a usar trajes especiales, separándolas de las mujeres honradas incluso en las tumbas, se les reservaba lugar aparte en las iglesias. No debe olvidarse tampoco que la escasa población y menor riqueza de las ciudades medievales impidieron el lujo y esplendor que acompañó al desarrollo de la prostitución en Grecia y roma. Sólo en el Oriente Bizantino e islamita se hallan ejemplos que recuerdan los de las modernas urbes mundiales en esta parte. Donde más parece haber concentrado el ejercicio de la prostitución es en las grandes villas universitarias, como Padua, Florencia, París, Heidelberg, Oxford y Salamanca.

Los moralistas no cesaron de clamar contra esta proximidad, cual lo demuestran en el siglo XIII las invectivas de Jaime de Vitry. Lo propio se observa en Italia por parte de Eneas Silvio y del Panormita, condenando la inmoralidad de los estudiantes de Siena. Era deber de los rectores vigilar que los estudiantes no salieses de noche para evitar la frecuentación de tales mujeres. Sin embargo, tales disposiciones eran poco respetadas, renovándose sin cesar con los abusos y escándalos, que se venían sucediendo.

La influencia de la prostitución ambulante en las ferias y mercados es uno de los rasgos característicos de esta época que excedió considerablemente a la antigüedad en tal concepto. Lo propio puede decirse de las grandes fiestas populares, como las de los Santos, de Pascua y Carnaval, de los torneos, de las cortes, peregrinaciones y romerías.

En cuanto a las grandes expediciones militares, como las de las Cruzadas, no hay que decir que los puertos de mar, como Hamburgo, Venecia, Nápoles y Lisboa, eran un centro de una enorme prostitución, como lo atestiguan las poesías de la época. No poca influencia ejercieron también en ella las gentes de condición servil, que no dejaron de existir en toda la Edad Media. Así, en Bizancio, a pesar de las prohibiciones de la emperatriz Teodora, hubo un gran tráfico de esclavas, lo propio que en Italia y en Grecia, no obstante renovarse los edictos persiguiendo tan vergonzoso trato. En las mancebías estaban tratadas las mujeres como verdaderas esclavas, y lo propio acontecía en todo el Oriente musulmán, lo que se refleja en la literatura de aquel tiempo.

En la Edad Moderna, a pesar de la influencia del Renacimiento y del descubrimiento de América, pocas modificaciones introdujo en tal estado de cosas. La aparición del terrible mal gálico o de Nápoles, coincidió con las guerras de Italia que trajeron como consecuencia la diseminación por todo el continente de las prostitutas de aquel país. Las obras de buenaventura-Desperiers, lo propio que la de Béroalde de Verville, enseñan hasta que punto la moda italiana se había enseñoreado de Francia, y otro tanto puede decirse de España, donde todo los transalpino hallaba acogida favorable.

Las regulaciones introducidas para combatir el contagio venéreo, se tradujeron en reglamentos contra la prostitución, que no hacían más que repetir los antiguos. Aquella triunfaba en realidad, no ya en las grandes ciudades solamente, sino en las mismas cortes, como de ello dan ejemplo la disolución de la de los Valois y los Médicis. El fausto y la ostentación de las favoritas de los monarcas y magnates, como Diana de Poitiers, Gabriela d' Etrées y tantas otras, no eran para desarraigar el vicio cada día más extendido. Las riquezas del Nuevo Mundo, aumentando las que ya existían por el comercio de Oriente, hicieron crecer el número de mujeres galantes, figurando en ellas sin pudor alguno, incluso damas de renombre en Italia.

El siglo XVII no sólo presenció la prostitución femenina, idealizada, por decirlo así, en la persona de Marión Délorme, sino que toleró el escandaloso espectáculo de la prostitución masculina, como de ello ofrecen ejemplo los meninos de Luis XIII y las anécdotas de Taillemant des réaux. Ningún país se vió libre de tales escenas, que verdaderamente subieron de punto en el reinado de Luis XIV y la Restauración inglesa. Las pinturas del conde de Gramont, las obras festivas de Quevedo y las sátitras de Pope y Prior demuestran lo escandaloso de la prostitución en todas las esferas sociales.

Lo propio cabe decir del siglo XVIII, inaugurado con la corrupción de costumbres de la regencia. Felipe de Orleans y el duque de Borbón precedieron sólo en sus liberalidades a las favoritas a los días de Luis XV y del Parque de Ciervos. Si a veces una feliz casualidad hacía cuando menos dorar por los esplendores del arte la bajeza del vicio en regias amantes, como la marquesa de Pompadour, las más de las veces no conducía sino a ruinosas prodigalidades. De ellas dieron ejemplo con sus mancebas el rey Augusto de Sajonia y el célebre ministro conde de Bruhl, que consumieron las rentas de sus estados.

La condición del promedio de las prostitutas no había variado mucho, sin embargo, viviendo la mayor parte de ellas en la mayor miseria, tiranizadas sus amas y sujetas a la arbitrariedad de la policía. Si en algún país, como Inglaterra, escapaban a la vigilancia gubernativa, por no existir legalmente en esta parte, su estado no era mejor en el fondo. De ello dan ge las comedias de Gay y las sátiras y libelos de la época, como los de Jonhson y Francis.

Entre las gentes acaudaladas y la clase nobiliaria el hábito de las cenas galantes contribuyó en gran manera a difundir la prostitución con apariencias más cautivadoras e inofensivas. Sin embargo, el número de mujeres entretenidas era verdaderamente asombroso en las grandes capitales, algunas de las cuales, como Venecia y roma, no eran más que centros de cortesanas, como se ve en las obras de Rousseau y de Casanova.

La tormenta revolucionaria francesa no acabó con la prostitución, como de ello dan ejemplo las obras históricas de los Goncourt, y sabido es el alcance que tomó durante el directorio, donde se plagiaron a su manera las costumbres grecorromanas.

Consolidada ya la paz europea y con el advenimiento de un nuevo estado de cosas, cesaron los escándalos de prostitución en las altas esferas, pero no por ello dejó de existir en otra forma. La fama de las entretenidas y mujeres galantes francesas, tan popularizada en las obras de dumas y de Murger, fue vervaderamente universal. La idealización del tipo de la pecadora por amor comenzada en la Manou Lescant y renovada en la Dama de las camelias, dio nuevos aspectos al problema social que estudiamos. Sea como quiera, la organización de las prostitutas no varió en lo esencial a pesar del cúmulo de reglamentaciones en todos los países, hasta llegar a la ausencia completa de ellas, como en la América del Norte. En cuanto a las dilapidaciones y prodigalidades con tales mujeres no dejaron de existir, alimentando la crónica escandalosa de la época, como lo atestiguan los nombres de Lola Montes y de Cora Pearl.

La prostitución de menores, la única perseguida por la ley, iba tomando, sin embargo, nuevos vuelos; no cesando de clamar contra ella los moralistas de todos los países.

Acerca de la prostitución entre los pueblos primitivos, hay que distinguir, ante todo, entre prostitución como plaga social, en el sentido que se le da comúnmente en nuestros días, y prostitución de carácter religioso, tal como existió en algunas de las civilizaciones primitivas, como Egipto, Fenicia y Babilonia.

martes, 28 de mayo de 2013

LOS DESPLAZADOS

La población colombiana víctima del desplazamiento forzado por la violencia está siendo empujada a una pobreza crónica que será difícil de superar. De hecho, hoy en día, buena parte de los hogares colombianos afectados por ese flagelo viven en condiciones tan críticas que en la mayoría de los casos, al compararlas, son peores que las que caracterizan la indigencia





La población colombiana víctima del desplazamiento forzado por la violencia está siendo empujada a una pobreza crónica que será difícil de superar.
De hecho, hoy en día, buena parte de los hogares colombianos afectados por ese flagelo viven en condiciones tan críticas que en la mayoría de los casos, al compararlas, son peores que las que caracterizan la indigencia .
Son dos de las varias conclusiones de un informe sobre las condiciones sociales y económicas en las que se encuentran los miles de desarraigados que tiene el país.
El estudio fue preparado para la Misión de la Pobreza y la Desigualdad de Planeación Nacional por los investigadores de la Universidad de los Andes Ana María Ibañez y Andres Moya.
En su análisis, los investigadores encontraron que la situación de los hogares víctimas del desplazamiento en los municipios receptores es más precaria que la que viven en los mismos lugares los pobres urbanos y los hogares indigentes.
" Por una parte, el tamaño del hogar, el número de menores de edad y la tasa de dependencia son mayores para los hogares desplazados frente a los pobres urbanos y rurales. De igual forma los hogares desplazados presentan menores dotaciones de capital humano medidas a partir de los años de escolaridad, que los hogares pobres e indigentes", subraya el informe.
El estudio señala que los niveles de desempleo para los miembros de los hogares desplazados son mucho más altos que los que se tienen para los miembros de familias pobres urbanas y rurales e indigentes urbanos.
La tasa de asistencia escolar para la población desplazada es significativamente menor que para la pobre e indigente urbanas.
Los investigadores encontraron que hay una mayor proporción de jefes de hogar analfabetas dentro de la población desplazada que en los pobres que viven en las ciudades mientras que el promedio de años de educación del jefe de hogar, del cónyuge y de los otros miembros de la familia desarraigada es menor que para la población pobre urbana e indigente.
Por sus niveles de escolaridad, menores tasas de asistencia educativa y su vocación agrícola, los desplazados están muy limitados para insertarse en los mercados del trabajo conduciéndolos a la informalidad laboral.
" Para los menores de edad, las bajas tasas de asistencia educativa, los índices de deserción escolar y la presión para vincularse en actividades generadoras de ingresos a una temprana edad, tambi´´en comprometen la posibilidad de que los menores de edad puedan superar sus condiciones de vulnerabilidad en el futuro y se conviertan entonces en mecanismos de transmisión intergeneracional de la pobreza", anotan Ibáñez y Moya.
En materia de salud, la investigación advierte sobre el alto grado de vulnerabilidad y precariedad en la que se encuentran los desplazados en Colombia. Señala que si bien hay mas hogares afiliados al Sistema de Seguridad Social, la salud de la población desplazada se deteriora como consecuencia de la misma situación por la que atraviesan.
En vivienda, la población desplazada tiene menor acceso a los programas oficiales que la oportunidad que tiene la población pobre o los hogares indigentes urbanos.
"El cambio en la tenencia y el tipo de vivienda, en especial de aquellos hogares que vivían en fincas y derivaban su sustento de actividades agrícolas en los municipios de origen, así como de aquellos que eran propietarios implica la pérdida de activos productivos e impone serios obstáculos para superar el choque que el desplazamiento genera y recuperar los niveles de bienestar", anota en uno de sus apartes el informe de los investigadores de la Universidad de los Andes.
El estudio señala que la migración forzada ha provocado también un impacto significativo sobre los ingresos y el consumo de las familias afectadas . El ingreso de los hogares desplazados los ubica, en promedio, apenas por encima de la línea de indigencia.
Políticas equivocadas e insuficientes
En su estudio, los investigadores de la Universidad de los Andes reconocen el esfuerzo realizado por las entidades del Estado para ayudar a la población desplazada pero advierten que el apoyo es insuficiente y en muchos casos los programas están mal orientados.
Señalan que atender a los desplazados exclusivamente con políticas dirigidas a los pobres, puede aumentar la vulnerabilidad de la población desarraigada e incrementar su riesgo de permanecer en condiciones de pobreza crónica.
Indica el informe que la principal debilidad de la asistencia a la población desplazada reposa sobre los programas de generación de ingresos los cuales considera poco efectivos .
"Por lo tanto, subrayan los investigadores, el programa de generación de ingresos esencial para que la condición de desplazamiento sea realmente un fenómeno temporal y no un fenómeno permanente con una alta demanda de recursos estatales".
Señalan que la asignación de tierras a la población desplazada ha sido bastante limitada mientras que la selección de beneficiarios ha sido un error recurrente en los programas de reforma agraria.
Insiste en que los recursos financieros asignados para prevenir y mitigar el desplazamiento son insuficientes y que hay poca claridad acerca de las responsabilidades de las entidades territoriales, falta de compromiso de las autoridades locales y deficiente infraestructura humana.
Más de 1,6 millones de desplazados
El informe parte del hecho de que el desplazamiento forzoso en Colombia afectaba, al momento de iniciarse el estudio ( mediados de 2005 ) a más de un millón 661 mil colombianos el equivalente al 3,6 por ciento de la población del país y al 13,1 por ciento de la población rural.
Revela que el fenómeno del desplazamiento forzoso se extendió a la mayor parte del país afectando hoy en día a 997 municipios del país, el 90 por ciento del total, ya sea por expulsión o recepción de personas.
El 57 por ciento de la población desplazada proviene de 78 municipios mientras que sólo 44 reciben el 66 por ciento de las personas expulsadas de sus lugares de origen ... Los departamentos de Putumayo, Chocó, César, Magdalena, Bolívar y Antioquia son los más afectados por el fenómeno del desplazamiento.
Bogotá, Magdalena, Valle, Sucre, Bolívar y Antioquia, son las regiones del país que más reciben a los desarraigados.



http://www.caracol.com.co/noticias/economia/los-desplazados-en-colombia-viven-peor-que-los-pobres-e-indigentes/20070704/nota/448941.aspx